Es común leer señalamientos tipo denuncia en artículos de opinión referentes a alguien en específico, cuestionando, preguntando, siendo «la forma» la capa que desnuda las intensiones.
Por desgracia, en el ejercicio del periodismo hay de todo… desde denuncias perfectamente fundamentadas contra el ejercicio político, empresarial o de otro tipo de una persona, hasta artículos verdaderamente inquisidores que provocan náuseas y claro, el descrédito del escritor como cola.
Por otro lado, el periodismo es investigación, es busqueda de detalles por los que los artículos inquisidores son facilmente detectables porque más que denunciar algo o a alguien se entretienen en descalificaciones demasiado personales y casi siempre fuera de contexto.
Las figuras púbicas están expuestas a que se escriba de ellas y buscan que así sea, pero es siempre un trago amargo leer líneas que al final nada aportan, ni al comienzo ni al final y más bien terminan siendo un desahogo del escrito que de alguna forma en vez de aportar al periodismo usa su línea editorial de bacinilla.
Periodista es todo el que de forma profesional ejerce el periodismo y en ello necesariamente no tiene que ver un título, sin embargo, la ética es un parámetro que establece al momento que es buen periodismo y que es simplemente chatarra, artículos de inquisidores que usan la pluma para propósitos que enlutan el ejercicio.
